20 Feb Mis implantes dentales
Cuando tenía yo 14 años tuve un accidente con la bicicleta y sufrí la pérdida de uno de mis dientes anteriores. Mi tío estomatólogo me confecciono una protesis fija, un puente, apoyada en los dientes adyacentes que también quedaron dañados por el traumatismo.
Con esta solución estética y funcional funcione durante años, aunque hubiera querido colocarme un implante en esta zona no hubiera podido porque en pacientes en crecimiento no se puede porque a la larga los otros dientes crecen y el implante queda donde se coloca.
Ya estudiando en la universidad otro traumatismo deportivo fracturo el puente y en este caso mi hermana me elaboro uno nuevo con materiales más modernos y que daban un aspecto más natural, el viejo se había ido decolorando de forma diferente a los dientes naturales de la lado.
Todo iba fantástico pero unos meses después desarrolle un quiste apical pos traumático en la punta de la raíz y el Dr Castro-Acuña me realizo una apicectomia y legrado del quiste infectado. La evolución fue favorable, mis dientes estaban tocados pero la estructura aún aguantaba.
Ya haciendo la especialidad en Barcelona sufrí una nueva fractura del puente por sobrecarga. Mi forma de morder de clase II, junto al stress laboral de la época condicionaban mi bruxismo, hábito de apretar los dientes.
Llegado este punto tome la decisión de solventar el problema de raíz y tras evaluar las raíces por un especialista en endoso caí decidimos que las raíces estaban pérdidas. Las mantendríamos lo que durará el tratamiento de ortodoncia y cirugía Ortognatica para apoyar sobre ellos los provisionales. Una vez finalizada la oclusion sustituiríamos las tres piezas por dos implantes y tres coronas.
Comencé la ortodoncia y me sometí a la cirugía Ortognatica. Una vez que la ortodoncista dictamino que los espacios estaban distribuidos mi hermano planifico el caso y realizamos un implante en hueso cicatrizado y otro de forma inmediata (extracción de la pieza y colocación del implante en el alveolo), además decidió añadir un injerto de hidroxiapatita y dos injertos de tejido conectivo del paladar para mejorar el resultado estético final.
Colocamos el provisional sobre el maltrecho diente que quedaba en el medio mientras los implantes se integraban. Una vez que pasó el periodo de integración de tres meses se me realizo la segunda cirugía para destapar los implantes y extraer la pieza en la que había ido apoyado el provisional. El Dr López Vilagran tenía preparado un provisional inmediato sobre los implantes y de esta manera no fui sin dientes ni un día.
Una vez pasadas varias semanas de modelado de los tejidos blandos se confeccionó la protesis definitiva y hasta hoy desde el día de la colocación. Ha sido un camino largo pero ha válido la pena.